Nuestros asiduos lectores sabrán que una de las actitudes que más valoramos en las bandas es su evolución. Nos encanta ver y escuchar cómo su música cambia, muta, progresa, o crece con ellos, sin perder su identidad por su puesto. Hay grupos que experimentan, buscando nuevos estilos, añadiendo nuevos sonidos o instrumentos; otros permiten que sus emociones e inquietudes se filtren en sus canciones; otros simplemente componen libremente sin importarles el resultado, la respuesta de público y crítica,… podríamos seguir enunciando actitudes que demuestran evolución musical en mayor o menor medida y llenar varias páginas, pero en todas encontraremos un factor común, nunca repiten la misma fórmula…aun si su anterior disco les ha supuesto un cierto éxito, continúan evolucionando como reflejo de su inquietud artística y libertad compositiva.
Y Holy Bouncer ha hecho eso.

El frío, como noviembre, ha vuelto de sopetón. Y nos ha traído como disco del mes Rebelión. De la misma manera, Los Ilegales, lejos de dejarse caer en un otoño de suave resbalar han regresado con un disco inmediato, despojado de artificios. Duro y a la encía. Apenas media hora cargada hasta arriba de rock y actitud.
A mediados de los ochenta corrían tiempos salvajes y parecía que los tiempos nuevos, encarnados en el icónico cambio de milenio, traerían consigo un mundo feliz. Pues no, los fans de Aldous Huxley tendrán que seguir esperando. La corrección política se ha impuesto como un tatuaje cada vez menos invisible. La incorrección política cada día se entiende peor y se diferencia menos de la vana provocación en busca de un estéril clickbait. Así, Jorge Martínez y los suyos son más necesarios que nunca en este “Mundo Carapijo”.

“Cena Recalentada” (Warner Music, 2018) nace como un capricho de Iván Ferreiro. Oficialmente, llevaba dándole vueltas desde que en 2014, en el festival Portamérica, ofreció un concierto compuesto íntegramente por temas de Golpes Bajos. Extraoficialmente, ya habíamos podido verle interpretar algún tema de sus paisanos, junto a Amaro, en el grupo de versiones Rai Doriva As Ferreiro, banda que serviría de transición para la carrera en solitario tanto de los dos hermanos.

Lo más importante no es el disco en sí, sino la oportunidad que se nos brinda de poder revisar a la banda de los ochenta, dónde se interpreta su discografía integra: “Golpes Bajos” (Nuevos Medios, 1983) que fue su primer EP, su único álbum “A Santa Compaña” (Nuevos Medios , 1984) y el EP tras el que se disolverían “Devocionario” (Nuevos Medios , 1985). Dejando únicamente fuera la canción “Prólogo” de este último.

Para todos los que en alguna ocasión han escuchado a golpes bajos, resulta imposible no intentar entonar “a lo Coppini” cuando suenan los acordes de “Cena recalentada” o “Malos tiempos para la lírica”, lo que hace que este trabajo sea especial. Iván ha sido muy fiel a los temas, pero en ningún momento intenta camuflarse tras las voces infladas de Germán, esto hace que sin querer en tu mente se monte un dueto perfecto entre los dos intérpretes.

En los últimos años, muchas veces tendemos a tomar la mala costumbre de ser derrotistas con ciertos grupos, pensando que no van a volver, que ya no suenan como en los primeros discos, etc. De esta banda, en mi caso, he llegado a escuchar este tipo de comentarios: que son una banda ya bastante experimentada, que ya no tienen la originalidad del principio… Precisamente, con la última creación “Marauder”, opino todo lo contrario. Interpol es una banda que se niega a vivir del pasado y que tiene la suficiente calidad como para llevar el rock a su terreno y darlo a conocer al público.

Cuatro años después de “El Pintor” (2014) y celebrar el decimoquinto aniversario de “Turn on the bright lights” el año pasado, vuelven Paul Banks y los suyos, con entusiasmo, con mucha vitalidad. La actitud debe es una cualidad fundamental en una banda de música, y aquí lo han plasmado. El sonido más rockero que se recuerda en un álbum suyo, dejando constancia de la inquietud por hacer cosas nuevas en cada trabajo. Por supuesto, la identidad post-punk que siempre les ha caracterizado sigue perenne, pero haber contado con la producción de Dave Fridmann (Beck, Vetusta Morla, Mercury Rev) dobla la apuesta.

Tras la exitosa floración de “Magnolia” (Lago Naranja Records, Enero 2017), la semilla musical de Rufus T. Firefly ha vuelto a germinar, esta vez en forma de flor de Loto. Este Loto viene a completar la etapa psicodélica de Rufus, concebido como una continuación no prevista de Magnolia e íntimamente ligado a ella, Loto posee una personalidad y fuerza suficiente como para haber nacido de forma independiente de la planta madre.

En Loto el horizonte musical de Rufus T. Firefly se ha visto expandido gracias a la colaboración de Manuel Cabezalí a la guitarra, Martí Perarnau con teclados y efectos, Julián Maeso al órgano Hammond y Lindon Paris en la orquestación de “Final Fantasy”. Grabado por Dany Richter, Brian Hunt y Víctor Cabezuelo, y producción de Manuel Cabezalí y el propio Cabezuelo, Loto se zambulle por completo en la psicodelia sesentera que marca esta etapa de la banda, abrazando un sonido más Lo-Fi, con menos producción, más armónico y transparente.

Mucho hablamos de los verdaderos predicadores del desierto en los años 80 y 90. En aquellos años la música independiente no existía y comenzaban a aflorar en España bandas que además cantaban en castellano, cuando la moda era cantar en inglés. Nombres como Los Planetas o anteriormente Surfin’ Bichos, los verdaderos predicadores del desierto, no hacían nada más que recorrer un largo trayecto de auténtico páramo con una cantimplora a medio llenar y sin saber cuando iba a durar su experiencia. Ahora, en 2018, puedes llegar a reírte de todo eso, mirando hacia atrás con cierto anhelo y sollozando que éramos felices escuchando esos temas, que poquita gente metía en sus cassettes.

Cuando una banda llega a su quinto disco puede ser por dos cosas. La primera es que tienen dinero para pagárselo y además no les importa invertir en que la gente lo escuche, incluso pueden ser ya, con cinco discos, grandes estrellas, o como poco pensar que lo son, porque suenan en todas las radios y hasta salen en la tele. La segunda cosa que puede pasar es que sean tan buenos, tan brutalmente magníficos, que tengan cinco discazos como cinco soles de cualquier planeta lejano.

“Una Semana en el Motor de Un Autobús” (RCA-BMG, 1998) cumple 20 años. La obra que marcó un punto de inflexión en la carrera de Los Planetas va a ser homenajeada durante este año.

Este disco llegó en un momento decisivo. Con la baja de May Oliver sólo quedaban Jota y Florent de la formación inicial del grupo. Era muy importante cuidar las nuevas incorporaciones, ya que un paso en falso podría acabar con la disolución de la banda. En este momento, se incorporan Eric Jiménez, batería de Lagartija Nick y Banin Fraile, a las guitarras y teclados, ambos pasarían a formar parte del grupo de manera permanente. Con este percal, la banda marcha a grabar a Nueva York bajo la producción de Kurt Ralske y tras la negativa del que fuera su primera opción Brad Wood. Finalmente no fue una mala opción, ya que se aprecia un cambio respecto a “Pop” (RCA-BMG, 1996) o “Súper 8” (RCA-BMG, 1994) con un sonido más depurado.

La música es una cadena formada por pequeños eslabones que no dejan de girar. En esa cadena entre tantos conciertos, festivales y estilos diferentes conoces a mucha gente con la que compartes vivencias, anécdotas, experiencias. Al final pocas de esas personas terminan formando parte de tu vida y marcándote de forma especial. En el constante rodar de la cadena, Ricky Falner y Ferrán Pontón, amigos de la infancia que se dedicaban a la música, decidieron aparcar por un momento sus proyectos paralelos, para formar una banda sin pretensiones, en la que dar rienda suelta a sus gustos musicales compartidos y disfrutar libremente de la música. Así nació Egon Soda. Una superbanda, con vocación de vía de escape en la que expresarse sin la presión de discográficas, crítica o público, que movida por el talento natural de sus miembros terminó convirtiéndose en parte muy importante de sus vidas.

Las cabezas y sus pensamientos son siempre un enigma para el resto. Lo que nos pasa por la almendra que tenemos se quedan ahí, dentro de nosotros y casi nunca se exterioriza. Nos cruzamos con muchas personas a lo largo de la semana y cada uno tiene sus cosas, sus problemas, sus pensamientos. Vigo es una de las cunas de la música en nuestro país. Quizás sin esta ciudad no se hubiera entendido la movida como tal. Madrid se llevó la fama, pero Vigo se llevaba la buena música. De ahí han nacido muchas bandas con éxito o sin éxito. De ahí nació Maryland, de le herencia de esos años mas mágicos. Empeñados en el éxito, en hacer lo que les gusta, tocar y tocar. Sus directos eran (y son) maravillaosos y ellos vivían en su mundo mágico. Tengo una banda de rock.

“Los Años Muertos” (Ernie, 2013) fue el punto de partida para dar a conocer a Maryland a el resto del mundo musical. Se pasaron al castellano y se entonaban más potentes aún sin dejar ese pop que deambula siempre por detrás en sus composiciones

Estamos ante una de las bandas de rock más importantes de la actualidad tanto dentro de nuestras fronteras, como fuera. Los navarros Berri Txarrak parece que pasan de largo de todos los que han querido vetarlos durante años, y todavía lo intentan, y consiguen hacer lo que les da la gana, siempre lo han hecho, y además llegando a mucho más público.

Iba a ser difícil superar a “Denbora de Poligrafo Bakarra” (Only in Dreams, 2014), pero, quizás a su manera, lo han conseguido. El tiempo te da esa forma de hacer las cosas que gustan a todos y ellos saben añadir los ingredientes necesarios para que el resultado final sea impecable. Los “infrasonidos” son más que nunca un nuevo pelotazo de unos Berri Txarrak que después de veinte años han conseguido agradar a los que alguna vez han degustado de sus ritmos trepidantes y además han logrado captar a los que buscan menos hardcore en sus producciones. Suenan a rock del más duro, a rock suave, a power pop puro e incluso a pop y además con su mayor arma, la lírica sigue siendo su punto más notable haciéndose cargo de la actualidad y contándolo como siempre en Euskera y traduciendo sus letras en su web por si alguien quiere saber lo que quieren contar.