Aranda de Duero, 9 de agosto de 2019.

Después de una gran primera jornada, encaramos la segunda con las ilusiones y la frescura que te da un buen desayuno entre amigos. Ducha y a la plaza del Trigo. 

A las 12 de la mañana le toca el turno a The Levitans, un trio con demoledores cargas de profundidad millenial. Directo contundente en el poco tiempo que tienen en el Trigo.

Las siguientes en escena son Rayo. Dream-pop en castellano, con ruido y distorsión y a las que teníamos muchas ganas de ver en directo.

En la plaza de la Sal disfrutamos de Invisible Harvey, melodías pop muy cuidadas y que ambientaron el previo a volver al Trigo a descubrir la sorpresa: ¡¡ KITAI !! con un homenaje al hardrock de los 70 y 80, dieron un concierto basado en versiones en las que participaron cantantes y músicos de otros grupos como Alberto Miss Caffeina, Oscar Ferrer de Varry Brava, Rafa Muñoz de Hombres G, Alejandro Jordá de Izal, Sean Frutos de Second, y para finalizar les acompañó Juanma Latorre, con sus temas clásicos y con la ya también clásica batería al aire por mitad de la plaza.

Fran González

Fran González

Redactor

Fernando Tello

Fernando Tello

Redactor & Photo

Mientras en el Escenario Charco  Los Caligaris montaban una fiesta con globos incluidos en la que pusieron a bailar a todos los presentes. El escenario que se caracteriza por la presencia de artistas latinoamericanos, entre los que también se encontraban Javiera Mena con su directo enérgico y entregado, a pesar de la hora de retraso acumulada y que nos hizo imposible ver a Meneo.

Directos al recinto. Nos espera la energía de los canarios Vinagres. La chibichanga llega al Sonorama. Directo incendiario y verbenita a las siete de la tarde. Y que arrancaba con grandes nubarrones y amenaza de lluvia, que finalmente se hizo real. Los Vinagres son volcanes en erupción y así lo han demostrado, a pesar de la hora y de la lluvia, hicieron bailar a todos los que allí estábamos chubasqueros en mano.

Dos discazos le han valido a Morgan para recorrer todo el país en una gira, la de “Air”, que ya casi llega a su fin. La voz de Carolina de Juan es maravillosa y en un escenario grande suena mucho mejor, pero finalmente la mayoría de los asistentes acudimos a buscar refugio a la carpa del humor, donde nos amenizó la tarde Danny Boy.

Jairo Zavala es el alma del proyecto Depedro. La verdad es que es difícil de explicar lo que Jairo produce en el público. Pero lo que sí está claro es que al terminar sales con una cara de felicidad que se contagia. Con todo lo que ha aprendido tocando por el mundo, sobre todo con los fantásticos Calexico, Depedro tiene para dar y tomar viajando por muchos estilos y muchos países musicalmente hablando. Un lujo que la lluvia por fin nos dejase disfrutar del concierto, aunque fuera parcialmente y nos regalase un amplio arco iris, un idílico fin de concierto.

Lebowsky fueron los primeros confirmados del año pasado después de su fallido intento en la pasada edición. Los murcianos son psicodelia pura con pinceladas más que claras de space-rock. Vienen con Ep recién salido del horno y en su directo pudieron demostrar que vienen pisando fuerte.

Uno de los cabezas de cartel internacional de esta edición eran The Vaccines. La banda de Justin Young lleva nueve años de andadura y sigue con la misma fórmula que les hizo subir al principio de la década. Guitarras garajeras y potentes y mucho postureo. 

Y llega el turno para otra banda que se despide de los escenarios. Hace unos años nos quedamos asombrados de su directo en el escenario 2 del Sonorama. Berri Txarrak fueron cambiados al tercero este año. Les da igual. Pueden tocar donde les pongan. Lo van a petar igual. Intensidad sobrepasando el hard-rock para poner patas arriba el Ron Negrita. Canciones como Spoiler, Denak ez du bailo, Katedral Bat, entre otras, en un corto repertorio en el que vuelven a atreverse con las versiones, esta vez Toro del Columpio Asesino. Vamos a echarles mucho de menos. Y me vuelvo a preguntar el porqué el 9 de noviembre se juntan Viva Suecia, Cooper y Berri Txarrak en un radio de 50 kilómetros. A quién quieres más a papá, a mamá o al hermanito. No puedo elegir.

Qué mala suerte la de Second el coincidir con los Berri y qué mala suerte la de Love of Lesbian el coincidir exactamente con los Vancouvers. Así que, nos quedamos en el Ron Negrita para poder degustar a los pioneros del grunge patrio. Se vuelven a juntar después de mucho tiempo y esto no nos lo podíamos perder. Pelos de punta volviendo a escuchar King Disaster en directo, tantos años después. Nos da tiempo a poder ver el final de unos Love of Lesbian con una elegante puesta en escena que incluía acompañamiento de una sección de vientos y la colaboración de Arkano en Universos infinitos. Como infinita era la marabunta que los veía.

La historia vuelve a aparecer en el escenario Aranda de Duero con los Deacon Blue. Formados en el 87 en una Glasgow muy fructífera, musicalmente hablando, “Believers” es el octavo disco en su carrera, que se interrumpió en los noventa para retomarse, con más calma en la década siguiente. 

La apuesta sorpresa del día en la Plaza del Trigo:  ¡Viva Sonorama! ¡Viva …… !