Borja Peinado
Redactor
En estos tiempos en los que todo dios tiene un podcast, una serie sobre uno de tipo criminal protagonizada por Selena Gómez, Steve Martin y Martin Short, no suena excesivamente bien, ¿verdad? Pues mejor no tomar conclusiones precipitadas, porque Only Murders in the Building es una maravillosa sorpresa.
Disney Plus nos ha traído esta ficción de forma semanal durante el último par de meses a través de su plataforma Starz. El catálogo se va nutriendo poco a poco de series que en USA se pueden ver en Hulu y esto le hace ganar muchos enteros.
Todo transcurre con normalidad en el edificio Arconia hasta que Tim Kono decide, presuntamente, quitarse la vida. El Arconia es uno de esos preciosos edificios neoyorquinos que llevamos toda la vida viendo en las películas, lleno de gente pija y peculiar. Para toda esa gente, el suceso no supone absolutamente ningún cambio, para nuestros protagonistas, un punto de giro en sus vidas.
Hay ocasiones en que solo se necesita una historia simple sin pretensiones con unos personajes atractivos para crear una gran serie. Para eso es indispensable un guion perfectamente cocinado y que el casting esté a su altura. Todo esto se da a la perfección en Only Murders.
Los tres protagonistas resultan graciosos y enigmáticos, cada uno en su estilo. Charles (Steve Martin) es un actor en horas bajas que vivió su mejor momento con las series de detectives de los 90. Su serie, Brazzos, no deja de ser referenciada. Steve Martin hace gala de su callo en la comedia de todo tipo y además es co creador de la serie junto a John Hoffman.
Mabel es una joven y enigmática artista que ha heredado un piso en el edificio. No encaja en esa clase social y destila una socarronería maravillosa. Selena Gómez está espectacular, otra de esas ex-estrellas Disney que se han sacudido el pasado a base de talento y buen trabajo.
Oliver (Martin Short) es un director de musicales arruinado en busca de una nueva gran idea. Solo se alimenta de salsas y cada vez que aparece en pantalla es para hacer reír. Es mi personaje favorito. Yo creo que los hijos de los 80 siempre recordaremos a Martin Short hablando “consigo mismo” en El chip prodigioso.
Apenas se conocen, pero la muerte de Tim Kono les hace descubrir lo que tienen en común, su pasión por los podcasts de crímenes. A partir de aquí, el humor, lo que más engancha de Only Murders, surge por el choque, como era de esperar, pero no solo generacional, sino también por la desconexión de los tres personajes con todo lo que les rodea. Juntos, forman su propia extraña familia investigando el caso Kono y grabando un Podcast. Todo está hecho con una clase apabullante desde los títulos de crédito hasta las recurrentes voces en off, la serie se permite hasta un episodio mudo, a lo Bojack.
La parte detectivesca, a lo Agatha Christie, es un whodunit de manual y está muy bien hilvanada capítulo a capítulo. Además, nos deja con un Cliffhanger para acabar la temporada de esos que quitan el hipo.
La verdad es que se echan en falta más series ligeras, entretenidas y sin pretensiones, pero bien escritas y ejecutadas. De esas clásicas que te hacen sentir bien, que te dejan una sonrisa en la boca. Mientras tanto, el siguiente asesinato en el Arconia ya está siendo investigado y esperemos que no tarde mucho en llegar.
