Vamos a darte un titular. Breve, inequívoco y concreto, un buen titular. Vamos a darte algo más. Mucho más que un titular. Más que una noticia. Más que felicidad, que ya es mucho. Más que esperanza, que es casi todo. Ten:
Los Planetas han publicado su décimo álbum de estudio, Las canciones del agua.
No sería preciso añadir nada más, pero vamos a decirte que Las canciones del agua contiene nueve canciones de un grupo inabarcable, por su singular modo de mirar la música y escuchar el mundo, en estado de gracia tras casi tres décadas de carrera. Molestos, controvertidos, necesarios.
Las canciones del agua se articula en dos bloques “temporalmente autónomos”, uno local y otro global: Granada y el mundo.
Imprevisibles, una vez más, Los planetas dan inicio a su décimo álbum con una sobrecogedora adaptación de “El manantial”, un poema en el que Federico García Lorca armoniza al ser humano y la naturaleza, que los granadinos convierten en una canción magistral, extática. Trascendente.
De Lorca a Khaled (PXXR GVNG, Los santos), haciendo suya “Se quiere venir”, del trapero granadino. Más Granada en la adaptación de “La morralla”, de Carlos Cano, y en Las “Alegrías, de Graná”, publicadas previamente como anticipo de este álbum que, en su segundo bloque, recopila cinco de las canciones publicadas por Los planetas desde el inicio de esa enfermedad epidémica que se ha extendido por el mundo y ha atacado a todos los individuos que lo pueblan. ¿Coronavirus?, ¿capitalismo? Escucha “La nueva normalidad”, “El negacionista”, “El rey de España”, “El apocalipsis zombie” y “El antiplanetismo” y decide por ti mismo.
Editado en su propio sello, El ejercito rojo, Los planetas ofrecen Las canciones del agua en tres versiones con dibujos y diseño de Javier Aramburu: CD, vinilo y una cuidadísima edición limitada y numerada de 2000 copias con carpeta abierta y vinilo transparente de 180g.