LORI MEYERS

Al fin y al cabo en un festival, por muy multitudinario que sea, no se siente tanta conexión como en un concierto individual de ellos y si a esto, además le sumamos la nostalgia y emoción de celebrar sus 20 años de música, tenemos la receta perfecta para pasar una noche perfecta, que entra a formar parte de la historia de la música nacional.

Me gustaría poder hablar de los teloneros, Cala Vento pero lamentablemente no pudimos entrar a verles por problemas de logística con la organización. No obstante quiero apuntar dentro de este artículo que Cala Vento es el claro futuro de la música indie española, esperamos acudir dentro de 18 años (Haciendo la cuenta de los 20 años desde el lanzamiento de su primer LP, llamado “Cala Vento”) a su concierto de celebración del 20 aniversario en el palacio de los deportes.

Eran las 21:00 y las luces del Wizink bajaron, se escucharon los gritos de miles de personas mientras salían los de Granada tras la pantalla de Leds gigante que ya llevaban en la gira de “En la espiral” (2017); empezó a sonar “Vertigo I” pero esta vez la pantalla no era el único adorno del regalo al espectáculo visual, sino que también había un grupo de baile que fue saliendo en varios momentos puntuales de la noche. Las siguientes del repertorio de 32 canciones fueron “Planilandia”, “Luces de Neón” y “Hostal Pimodán”, 20 años ya en tan solo 4 temas. Esto se sucedió durante toda la noche, no había un orden aparente aunque al final todo cobró un sentido.

Me gustaría destacar algunos momentos los cuales considero muy importantes. Escuchar canciones como “Dilema” o  “Mujer esponja” en un recinto tan grande es un regalazo; y sobre todo ver que todo el mundo las conoce, que no están ahí por “Emborracharme” y “Mi Realidad”, que no es por el postureo que tanto aflora últimamente; ver eso, cantar y bailar al unísono, te hace sentir que formas parte de una gran familia, la familia de “Los Lori” ó “Los Meyers”.

Debo comentar también el homenaje a Antonio Vega, con su “Esperando Nada”, momento muy especial en el que estoy seguro de que a más de uno le salió una lágrima.

Y por supuesto, destacar tal ‘traca final’ del segundo bis, después del primer cierre con “Emborracharme”. “Religión”, “¿Aha han vuelto?” y la famosa “Mi realidad”. 

Quien haya asistido a un concierto de Lori Meyers en los últimos 3 años, ya sabe que ese final es muy especial. Los granaínos saben que “¿Aha han vuelto?” y “Mi Realidad” son himnos de la música indie española y los tratan como tal, no dando tregua entre ellos y juntando perfectamente el final de la primera con el inicio de la segunda. Un momento de éxtasis en el que no has terminado de bailar y ya tienes que empezar a saltar y gritar hasta que te quedes sin pulmones “Mi mundo que es mi realidad…”

Por último, Lori Meyers se guardó un as en la manga y a lo “escena post-créditos” tocó el verdadero final de la noche,”La Caza” un tema de la Cara-B de “Hostal Pimodan” (2006), canción la cual no tocaban desde 2013 y que fue el broche perfecto a la noche por su toque navideño.

32 canciones son pocas para repasar 20 años de música, no creo que fuéramos los únicos a los que se nos quedó corto el concierto, por extraño que suene. Lori Meyers se despidió con la promesa de que nos veríamos pronto, aunque nos toca esperar a 2020 para volver a disfrutar de ellos. Feliz navidad Lori Meyers, os deseamos otros 20 años de éxitos porque la verdad es que os los merecéis.