Ciudad Real, 26 de septiembre de 2019. Sala Zahora Magestic

Tras su paso por el festival Granada Sound, León Benavente comenzaba su gira de salas para presentar su nuevo álbum “Vamos a Volvernos Locos” (Warner Music, 2019) en Ciudad Real. Una ciudad con habitualmente poco movimiento se movilizó ante la llegada de los leones para congregar a más de 500 personas en la sala Zahora Magestic que disfrutaron con el energético directo de la banda.

Pasadas las diez de la noche el cuarteto subió al pequeño pero acogedor escenario de la sala donde el público entregado los ovacionó intensamente. Entre silbidos y aplausos sonaron los primeros acordes de “Cuatro Monos”, canción que abre su nuevo álbum a modo de enlace con sus anteriores trabajos y más concretamente con “Habitación 615”. A continuación y con el corazón latiendo al ritmo de “Amo”, cuya letra podría haberla escrito el mismo Bécquer, fueron muchas las parejas que de una manera furtiva se hicieron alguna carantoña. Debo decir que podríamos haber echado en falta la voz femenina de Eva Amaral en este tema, pero sinceramente, la voz de Abraham es tan espectacular en directo que no hacía falta más. 

Eva Serrano

Redactora

Así, siguieron con “Como la piedra que flota” también single adelanto de su nuevo álbum que en el disco cuenta con la voz de María Arnal. Pero no fue hasta que el popular tema “En la Ribera” empezó a sonar cuando realmente el público se mostró en su salsa. Desde ese mismo instante hasta el final no hubo un solo instante en el que la gente no dejara de cantar y de bailar.

Entre las escasas intervenciones entre canciones que tuvo el solista, cabe destacar el momento en que comentó que el grupo ya había estado en esa misma sala al inicio de su carrera musical como León Benavente (allá por el 2012) y que estaba inmensamente agradecido de ver como su público había aumentado en volumen pero no en entrega. 

Tratándose de León Benavente, en su concierto no pudieron faltar los mensajes políticos, de manera que obviamente sonaron las dos canciones más reivindicativas de su último álbum “Disparando a los caballos” y “Tu vida en directo”, la cual no sólo cierra el disco sino que también cerró la primera parte del concierto.

Tras un brevísimo descanso volvieron con “La canción del daño” en la que el coqueto Abraham Boba nos dejó a todos hipnotizados con su movimiento de brazos y manos. Tras un verdadero paréntesis de calma y serenidad, no en vano es la balada que forma parte de su “Vamos A Volvernos Locos”, cambiaron completamente el registro para poner su versión más cañera en funcionamiento y cerrar el bolo a pleno pulmón con tres de nuestras favoritas: “Ayer salí”, “Ser brigada” y la provocativa y atrevida “Gloria”. Toda una exhibición de potencia.

Así, tras más de hora y media de velada y como si fueran a perder un tren el grupo terminó el concierto sin esperar a recibir los aplausos del público, que podrían haber sido muchos más. Quién sabe si esta salida tan acelerada fue forzada por el calor insoportable que hacía en la sala o si forma parte de su nuevo espectáculo, lo comprobaremos en su próximo concierto a 30 grados. 

En cualquier caso, lo que sí podemos afirmar sin dudar es que el directo de la banda es un brutal espectáculo y que han vuelto en plena forma. Si como dice la primera frase de “Cuatro Monos”, un día más buscando emociones fuertes… gracias a Luis, Edu, César y Abraham podrás encontrarlas.