Ciudadano Suárez

Ciudadano Suárez

Redactor

DISCO DEL MES DE NOVIEMBRE DE 2019

Subterfuge Records, 2019

Debe ser otoño a juzgar por las canciones. También debemos haber sido muy buenos en otras épocas. El karma, Shiva o José Velez parecen habernos bendecido por invertir nuestra pasión, salud y dinero en directos y discos. La temporada viene muy fuerte y casi no hay tiempo material de disfrutar de la avalancha de novedades que se presenta a nuestro alrededor. Ahora entendemos lo que hacemos aquí y recordamos lo que queríamos ser de mayores.

Una de las ventajas de estos períodos es que permite discernir con mayor claridad entre lo que es un truco y lo que es la verdad. Y “El Milagro” pertenece indudablemente a la segunda. 

Juan Tallón, uno de los mejores columnistas de este país, suele citar a Juan Rulfo diciendo sobre “Pedro Páramo” que está escrita para que solo se entienda después de leerla tres veces. Si por casualidad la entendías a la primera o a la segunda, significaba que no te habías enterado de nada. Eso también diferencia un buen disco de uno mayúsculo y esto, a veces, es tan simple, que lo simple es olvidarlo.

Querido lector, seguramente sea también “Lo Que Te Mereces”, un trabajo que paladear siendo consciente de las cosas realmente urgentes y que te proteja de la autoayuda barata exhibida en tazas. Por supuesto que Viva Suecia se han expuesto al veneno que supondría haber bajado el nivel alcanzado en sus dos primeros elepés. Pero la acogida que ha recibido durante estas semanas únicamente ha constatado que ellos sí que, sin duda, han conseguido lo que querían ser de mayores. Y que entre lo que quieren y lo que deben, al menos por una vez y en este sentido, sí han cumplido ambas.

El tercer corte es “Necesitarnos Tanto”, tan pegadiza como espiritual y que recuerda a las esculturas de Corradini, convirtiéndose así en la metáfora perfecta para todo el disco. La voz y la melodía es un velo capaz de atraer la atención como lo hace la luz con los insectos. Pero una vez que uno se aproxima a ella, es capaz de percibir en una capa inferior el resto de contornos letrísticos e instrumentales que dan forma a la pieza. Tras la enésima escucha, una vez que uno vuelve en sí, y la mira con otra perspectiva, se percata de que se ha conseguido todo eso con la ayuda de la solidez inaudita del bloque de mármol que son la potencia de su bajo y batería. 

En “Días Amables” demuestran que a pesar de tener más de un registro musical sí han tomado un camino único, el de salir a vencer. Ahora ya pueden saber qué se siente de este lado, cuestión que no a todos les pasa una vez en la vida. “Algunos Tenemos Fe” fue uno de los adelantos y, con una letra memorable, parece llamada a convertirse tanto en uno de los pelotazos del disco como en la voz consecuente que se repita dentro de tu cabeza durante días. 

“La Fuerza Mayor” da paso a una segunda parte más tranquila del larga duración, tratando de hacer votos de paz en busca de ser capaces de llegar a los cien. Aún así, en “Te Prometo” no dejan de fabricar luz a pesar de transitar por temas que pueden llegar a ser tan amargos como la soledad y el amor propio. Tanto en ella como en “Creo Que Aprendí a Decir Que No” toma más protagonismo y atención la sección rítmica. 

El corte que da título al trabajo, “El Milagro”, tira a matar tornándose por momentos en casi en orquestal. Quizás ya puedan plantearse concederse algún premio. Tienen tiempo de un canto a la alegría al salir de los lavabos con “Será” antes de rematar subiendo rápido y encendiendo al personal en “Fóllame”.

Si no quieres culpar al sitio o al instante, avisado quedas de que deberías estar presente cuando revienten todo esto en concierto. Aunque también debes tener en cuenta de que te convertirás irremediablemente en uno más de los que los quieren, y eso es un problema también, no volverás a poder decirles que no