Toledo, 17 de noviembre de 2018. Círculo de Arte

Este otoño extrañamente cálido y bonancible que estamos pasando invitaba a volver a disfrutar del sábado noche, a salir a la calle y reencontrase con colegas y amistades forjadas alrededor de la sala Pícaro, del Círculo y de Rufus T. Firefly.  Quienes hemos seguido a la banda desde que presentó su propuesta musical con Magnolia (2017) celebrábamos volverlos a recibir con su nueva obra en el Círculo de Arte.

Santi Hernández

Santi Hernández

Redactor

Laura Castro

Redactora & Photo

Fran González

Fran González

Redactor

Hubo buena entrada y un poco más tarde de las 10 de la noche, apagaron todas las luces y Tsukamoki empezó a sonar, le siguió “Halcón milenario” y para acabar el primer trío de canciones, sonó “Loto”. Entonces Víctor Cabezuelo, cantante de la banda, se dirigió a la audiencia para agradecer que hubiéramos decidido acompañarles en su regreso a los sitios que vieron nacer Magnolia, su anterior trabajo. A continuación no hubo pausas, las siguientes once canciones se fueron sucediendo amablemente, repasando ambos discos. El excelente sonido, que iba creciendo en volumen, nos fue induciendo a un estado de ensoñación que era  iluminado por el juego de luces de la banda. Éste siempre iba acompasado al vertiginoso golpear de batería de Julia tan inconfundible: siempre trepidante y sobrecogedor.

Y con todo este ambientazo, llegaron los últimos veinte minutos del concierto. Víctor avisó de que empezaba la traca final y se iban a marchar. Deseaba que hubiéramos tenido un buen viaje. Así fue cuando empezó a retumbar el templo, cuando la intensidad se hizo sublime y apenas acababa un tema ya empezaba el siguiente. El volumen era atronador. No había tregua pues habían decidido acabar por todo lo alto. Apoteósico.

Rufus ya se han hecho mayores, se han graduado en la larga gira de verano y se han reafirmado en la poco común propuesta de temas de largo desarrollo que huye de estribillos facilones.  Se arriesgaron a hacer una propuesta honesta que, siguiendo su instinto, sentían que debían hacer para darle sentido al difícil mundo musical. Creo que todos los que estuvimos ayer confirmamos que cuando se hace música con amor, inspirándose en la naturaleza y con la honestidad por bandera, lo más probable es que triunfe. Ahora se iban a encerrar para volver a intentar a hacerlo. Y así sigan muchos años y sigan viniendo a visitarnos a Toledo. Ellos saben que les queremos.

Repertorio: Tsukamoki, Halcón milenario, Loto, …0…, Demogorgon, Cisne negro, Espectro, Ultima noche en la Tierra, Cristal oscuro, San junípero, Un breve e insignificante momento en la breve e insignificante historia de la humanidad, Pulp fiction, Pompeya, Nebulosa jade, Final fantasy, Magnolia, Rio Wolf.