14-15 de octubre de 2022, Moby Dick Club, Madrid.

El Primera Fila Fest es una iniciativa del colectivo Emergentes de Primera Fila, que sin ánimo de lucro y de forma itinerante reúne a varias bandas emergentes en formato mini festival para que puedan mostrar sus proyectos y tener más visibilidad dentro de un circuito de salas cada vez más complicado y agresivo.

En su edición más importante y también la más extensa hasta la fecha, con dos días de duración, y ocho bandas participantes, el Primera Fila se celebraba en la mítica sala madrileña Moby Dick el fin de semana del 14 al 15 de octubre tras haber pasado por ciudades como Murcia, Granada, Santander, Sevilla o Valencia. Las bandas participantes de esta edición formaban un heterogéneo cartel, con diferentes propuestas en cuanto a estilos y directos, que hacía especialmente atractiva la asistencia para cualquier aficionado a la música emergente y a las bandas noveles. En nuestra crónica repasamos lo que dio de sí el primer día de festival.

Pakito Serrano

Pakito Serrano

Redactor

El viernes arrancaba con la energía positiva que desprenden los Gorila Flo. La banda madrileña jugaba en casa y eso se hizo notar llenando la sala al contar con la asistencia de amigos y conocidos entre el público general. Los Gorila presentaron su primer y reciente disco, “Escala para otro vuelo” (Autoeditado, 2022), un compendio de temas pop-rock de inspiración poética con el que lograron crear un elevado ambiente de comunión con sus seguidores. Recordando sus primeros pasos en la música, en los que versionaban temas de sus bandas indies favoritas, incluyeron una versión de Lori Meyers para la ocasión.

A continuación, tomaban el testigo el dúo de electropop festivo de Tú Peleas Como Una Vaca quienes se han hecho un nombre en la escena indie gracias a su innata capacidad para mezclar géneros e influencias, escribir letras que desde el humor nos hablan de las desgracias del día a día, y mostrar su toque nerd ochentero de la forma más elegante posible. Los Tú Peleas tienen un directo lleno de hits ante los que es imposible no bailar como “Me niego rotundamente a bailar reguetón, “Lo mío no es bailar (Soy más de Pokémon)”, “Postureo” o sus fantásticas versiones de “Ateo” de C. Tangana y Nathy Peluso y de la mítica “Vivir así es morir de amor” de Camilo Sexto, que convirtieron la noche en una fiesta synth-pop. El techno-nerd ha llegado para revelarse ante tu dictadura mainstream musical.

Los manchegos Sugarcrush llegaban lanzados al Primera Fila Fest de Madrid tras su exitoso paso por el Sonorama y el Pulpop. Se nota la evolución en el sonido en directo de los Sugar, mucho más compacto y trabajado, una subida de nivel que se hace tangible en conciertos como el del pasado día 14 y que les ha abierto las puertas de una gira que les llevará por varias salas de toda España. El trío de power pop parte de su autodefinido estilo “trans-yeyé”, una mezcla de pop garajero y punk con bizarras y satíricas letras, para hacer las delicias de un público totalmente entregado que coreaba todos y cada uno de los estribillos de sus canciones. Las risas y los pogos se mezclaron en pildorazos como “El cantante de Maná”, “La Fiesta”, “Concepción Velasco”, la recién estrenada “Dale Calentito” o “El Verano”. Tuvieron tiempo para mostrar su cara “más seria”, compositivamente hablando, con “Mal día”, la contra al “Buen día” de Los Planetas y terminar por todo lo alto con el odio eterno a los festis modernos.

Para finalizar la noche Marsella inundaba de fiebre rosa la Moby Dick, una fiebre que ha contagiado salas y festivales de toda España. Germán G. Dobarco es la cara visible del proyecto de pop electrónico iniciado en 2019 y un auténtico “front-man”, capaz de subir a cantar y mejorar “La Fiesta” junto a los Sugarcrush, atrapar al público con su carisma durante toda la actuación o emocionarse al dedicar uno de sus temas a su hermano fallecido delante de sus padres que se encontraban entre los asistentes. Ataviados con sus famosas chaquetas rosas la fuerza y destreza de sus experimentados músicos complementaba la voz de Germán y resaltaba la propuesta de baile y diversión de Marsella. La banda repasó sus mejores canciones y presentó su versión del “As It Was” de Harry Styles, “Ya no es igual”, que en tus auriculares suena  mezclada por David Van Bylen. Por cierto, si Germán consiguió mejorar “La Fiesta” de Sugarcrush, Juanjo y Carlos lograron justo lo contrario cuando devolvieron el “cross-over” en “Histeria de lo nuestro”, toda una surrealista colaboración que esperamos se plasme alguna vez (bien) en el estudio y que fue la muestra perfecta del buen rollo imperante entre las bandas participantes.

El sábado fue el turno de Coque Tornado, DJ Moderno, Nebulossa y Turpin, quienes consiguieron cosechar otra gran entrada en la Moby madrileña, reforzando así la encomiable y agradecida iniciativa del festival y confirmando que hay público suficiente para que las salas y promotores apuesten de manera firme por las bandas emergentes, pues en definitiva ellas son el germen del cartel de los festivales del futuro.