ESTRELLAS Y ESTRELLITAS CUMPLEN LO ESTABLECIDO

Madrid. 12 de julio de 2025, Recinto Iberdrola Music

La jornada del sábado 12 de julio marcó el cierre del Mad Cool, un broche final brillante para un festival que ha sabido reunir talento, diversidad y calidad en Madrid, ofreciendo un día repleto de grandes actuaciones. El error, aunque grave, del jueves, sólo afecto a dos bandas, y el resto del festival ha salido bien. El engranaje, año tras año, se va perfeccionando y va haciendo que la maquinaria funcione cada vez mejor. 

Fernando Tello

Fernando Tello

Redactor & Photo

Sara Fernández

Sara Fernández

Redactora

Seguimos sin entender que Madrid y Getafe no lleguen a un acuerdo, y eso obligue a ver deambular coches por Getafe buscando aparcamiento y molestando a los vecinos, quitándoles plazas para ellos, mientras el parking del Coliseum esta vacío con un cartel de “solo residentes”, pero ya sabemos que la administraciones son lo que son. Nunca piensan en la gente, en este caso, ni en lo que vienen, ni es lo que tienen que sufrir la llegada de multitud de gente a su zona. Un despropósito. La tarde comenzó con el soul envolvente de The Teskey Brothers, banda australiana que con su combinación de blues, soul clásico y raíces profundas conquistó rápidamente a los asistentes que empezaban a llegar al escenario principal. La voz cálida y poderosa de Josh Teskey transportó al público a atmósferas nostálgicas, reafirmando la fuerza de su propuesta en directo. Muy interesantes y merecedores de una mayor audiencia. Girl In Red tomó el relevo aportando frescura y energía juvenil. Marie Ulven, convertida ya en un fenómeno generacional del indie-pop, ofreció un concierto vibrante, destacando canciones como “Serotonin” y “We Fell In Love In October”, mostrando la solidez y autenticidad que la caracteriza.

La tarde continuó con Finneas, cuya versatilidad y talento compositivo quedó patente en su presentación. Conocido por su labor junto a su hermana Billie Eilish, mostró al público madrileño su capacidad individual para mezclar sonidos pop alternativos con letras introspectivas y profundas. St. Vincent, referente del art-rock contemporáneo, brindó una actuación memorable. Annie Clark, siempre innovadora y sorprendente, mostró un set intenso con protagonismo de su último trabajo, “All Born Screaming”, acompañado de una puesta en escena elaborada y sofisticada. La explosividad llegó con Thirty Seconds to Mars, liderados por Jared Leto, que desplegó su conocido carisma escénico con una actuación repleta de épica y energía, aunque comenzaron casi veinte minutos tarde, lo que lastró su setlist a diez temas. El grupo repasó sus grandes éxitos  demostrando que continúan siendo un espectáculo imprescindible en vivo.

Glass Animals trajo consigo una explosión de color y ritmo, destacando especialmente con los temas de su exitoso álbum “Dreamland”. La conexión con el público fue inmediata y constante, certificando por qué son uno de los grupos indie más populares del momento. La esperada aparición de Olivia Rodrigo causó revuelo entre el público más joven. Su actuación, cargada de emociones adolescentes y melodías pegadizas, destacó especialmente al interpretar éxitos como “drivers license” y “good 4 u”, mostrando por qué es una de las artistas pop más relevantes actualmente. Bloc Party cerró el festival en el escenario 3 con la dosis justa de nostalgia y vitalidad. Kele Okereke y compañía demostraron que su legado permanece intacto, repasando sus grandes temas como “Banquet” y “Helicopter”, asegurando una despedida por todo lo alto. Y mientras en el escenario “Orange”, Justice ofreció un espectáculo electrónico potente y dinámico, convirtiendo el festival en una auténtica pista de baile. Con un set repleto de clásicos como “D.A.N.C.E.” y “We Are Your Friends”, el dúo francés puso a todo el recinto en movimiento. Un espectáculo visual y musical como siempre, porque estos no fallan nunca, espectacular para terminar el festival.