El grupo de Terrassa sorprende con un trabajo de cuatro canciones que pone música al hartazgo de una generación perdida

De nuevo, la banda de Terrassa, sorprende con un vídeo creado por ellos mismos.

Anabel Lee (del verbo ‘leer’) pone banda sonora  a los días extraños y prácticamente distópicos que hemos estado viviendo en el último año y medio. Y lo hacen a través  de su nuevo EP Generación Perdida en el que salen a flote todos esos miedos, inseguridades, desazón, hartazgo y mucha rabia de unos tiempos donde todo es desencanto e incertidumbre con la sensación  perenne de que nunca vamos a obtener lo que merecemos.

Un EP compuesto por cuatro canciones que tratan de la crisis existencial de la juventud actual y que la propia banda de Terrassa está viviendo en sus carnes. Con este trabajo, publicado en menos de un año tras el lanzamiento de su destacado álbum debut, retoman su esencia más predominantemente punk con un sonido mucho más agresivo y energético. Un estruendoso grito guitarrero para que el descontento resuene lo máximo posible.

«La diferencia con lo anterior es que nadie pedía nuevas canciones tan pronto, cuando no han pasado ni 6 meses del estreno del primer disco. Ese álbum nos fue tan necesario como lo es este EP. Hay menos urgencia, pero la misma rabia» comenta el grupo sobre la celeridad de Generación Perdida.

La angustia vital de ‘Casi 30’, los comportamientos sin responsabilidad de ‘Academia Rushmore’, la nostalgia de tiempos mejores de ‘La Hora Peninsular’ y el halo de esperanza que supone ‘Concha Velasco’. su nuevo single, (una oda a la amistad verdadera) conforman una obra que en palabras del grupo catalán lo sienten como «su trabajo más maduro, signifique lo que signifique eso».  Generación Perdida es la reescritura de unas nuevas reglas mientras intentamos averiguar si todo lo que aprendimos nos va a servir para algo. 

«La nueva realidad se nos hace muy extraña. No podemos dejar de hacer conciertos porque es lo único que nos hace realmente felices, pero ya se nos hace difícil que las personas que vienen a vernos sigan a tanta distancia, sentados y obligados a no poder despegar el culo del sitio. Son días extraños para todos. Las cosas van a cambiar y cuando eso pase queremos estar preparados. Necesitábamos estrenar nueva música y sumar para forzar ese punto de inflexión», reflexiona Anabel Lee.