AMAIA

Si Abro Los Ojos No Es Real

Universal Music

Enero 2025

Miguel Mori

Miguel Mori

Redactor

Con doce canciones que oscilan entre la crónica social y el realismo mágico, Amaia nos abre una ventana a su realidad más íntima, donde reflexiona sobre la vida, la muerte, el amor y el mundo que la rodea.

Pocos artistas han realizado una labor tan destacable como Amaia a la hora de construir una carrera musical que baile con tanta gracia en la fina línea que separa el mainstream de lo alternativo. Sin embargo, en este proyecto da la sensación de que los pasos se dirigen más hacia lo primero: un trabajo con apuestas menos arriesgadas y más enfocadas en lograr un producto final sólido sin perder la esencia que permite reconocer a la artista en cada verso de cada tema. No encontraremos en este disco propuestas cuyo concepto se aleje demasiado de lo que podemos hallar en las listas nacionales más populares.

Que esta propuesta no haga piruetas para tratar de sorprendernos no le resta valor ni ideas que la conviertan en un gran proyecto. Se percibe en cada segundo del disco el extremo cuidado puesto en los detalles. La instrumentación es delicada y está llena de matices cargados de influencias, desde ritmos latinos en ciertos segmentos, como en Auxiliar, hasta el uso de instrumentos menos comunes, como el arpa, que nos acompaña a lo largo del trabajo, ayudando a crear esa atmósfera de relato mágico que impregna el disco y le otorga un encanto característico.

Todo esto acompaña la voz delicada pero intensa de Amaia, que mejora con cada proyecto que presenta, aunque en algunos puntos del disco se siente algo sobreproducida, al igual que ocurre con la parte instrumental. En general, esta sensación se mantiene a lo largo de toda la obra. Da la impresión de que se ha priorizado la mejor calidad sonora posible por encima de la autenticidad del mensaje que subyace en el álbum. Y es que las letras de este disco son las más pulidas y cargadas de significado de toda la trayectoria de la artista. No puedo evitar pensar que una versión acústica del proyecto nos permitiría apreciar realmente lo que Amaia quiere contarnos con su tercer álbum.

El nuevo trabajo de la artista pamplonica es una apuesta segura, cargada de sentimiento e intensidad, aunque opacada por una sobreproducción que desdibuja su propuesta.