Tulsa estará en sala But de la capital el próximo día 8 de junio presentando su séptimo trabajo de estudio, Amadora, junto a su banda, los temas que engranan esta obra conceptual y rica, sin dejar de lado las canciones que la han llevado a colocarse como referencia del pop de autora nacional. Como artista invitada, será un lujo contar con la presencia de Adriana Buenavista sobre el escenario de la But.

Sobre el nuevo trabajo de Miren Iza:

¿Se puede ser maldita y pop? Amadora es una respuesta afirmativa

Tiene chispa. Y tiene aromas surreales.

Es un suceso profundamente original dentro del indie.

Escapa a la música de consumo rápido con composiciones que hacen pensar en la literatura de Lucía Berlín, Otessa Moshfegh o Eider Rodríguez.

La música es la prueba de que podemos reinventarnos a pesar de la pesada carga de la herencia y del daño.

(María Velasco)

Desde esa mirada de múltiples perspectivas, en la que Amadora es una, y son muchas, el dolor y los embrollos en el cuerpo aparecen como fuga o facilitadores de preguntas esenciales acerca del amor, las madres, la amistad o la identidad y la entidad de las señoras.

Andrea Buenavista ha llegado dispuesta a hacerte llorar a través de unos auriculares enredados, en el metro o en un Alsa a media noche. Pero también ha venido para gustar y hacer reír a todas las madres de cada lado del océano. Andrea Buenavista se presenta como una suerte de crooner, de las que susurran con despreocupación y voz grave sobre amor, despecho, corazones más vacíos que la despensa de una casa de verano durante el invierno, mentiras y todas esas situaciones cómicas que, vistas con distancia prudencial, brinda la amargura (como claman las folclóricas).