«Te está quedando un «Cartel precioso» cantan las Tiburona con más razón que unas santas en su flamante sencillo, bautizado justo con ese nombre. Y es que -date cuenta amiga- de que vivimos en una suerte de ‘festival de la marmota’ que se repite a lo largo y ancho de la geografía de nuestro país. Los mismos nombres reiterados hasta la saciedad en esos eventos musicales que casi se parecen más un centro comercial que a cualquier otra cosa. Ya iba siendo hora de que alguien lo dijera bien alto ¿estamos de acuerdo?
Por eso ya nos hemos enganchado a la nueva entrega con la que Tiburona nos recuerda cuánto nos gustan sus afiladas fauces. Porque lo cierto es que nuestras protagonistas no dejan títere con cabeza. Y si quedaba alguna duda, te lo cuentan ellas mismas: «Cartel precioso se rebela contra el magnate que tan pronto construye un festival de música, como un parque de atracciones. También contra el colegueo que funciona como filtro para decidir cuáles son las bandas elegidas y cuáles, ajenas a eso, se quedan fuera». Chapeau!
Y por si con su nuevo sencillo no era suficiente, lo han acompañado además de un videoclip a juego en el que escenifican con precisión todo su contenido. La pieza se ha grabado en la madrileña sala Wurlitzer Ballroom, de su montaje se ha encargado Esther Galván y a sus protagonistas ya las conocéis: ¡Tiburona!
Una nueva muestra de cómo Supercarmen, Laura y Rita se han convertido, en tan solo un par de temporadas, en una de las sensaciones de nuestra escena. Una banda capaz de entregar auténticos pildorazos sónicos que sacudan el establishment machirulo.
Para muestra, un puñado de canciones imbatibles y a cada cual más feroz: «No me interesa tu opinión», «Que viene el lobo», «Sola y feliz» y «Aquí en mi nube», inspiradísima versión de The Rolling Stones.
Luego llegaría ese disco, «Sola y feliz», homónimo al single, y toda una declaración de principios. Además, un excelente catálogo de las múltiples virtudes de Tiburona, con una habilidad especial para saltar del rocanrol grasiento al encanto ye-yé sin despeinarse siquiera. Si quieres hacerte con una copia ¡aún estás a tiempo! Pincha aquí y será toda tuya.
