Hace casi un año, satisfechos, pero cautos, vinimos a prevenirte. Graduamos nuestras ganas, el desdén de unos, la euforia de otros y el despiste de los de más allá. Simplemente, te invitamos a escuchar con nosotros lo que Paulina, Laura, Ana, Isa y María, Las Dianas, tenían que contarnos. Y te dejamos hacer. Tú, a tu aire.
Volvimos ocasionalmente, abandonados ya a su impetuosa ingenuidad, su lógica aplastante, su desvergüenza y su verdad, para contarte que tal o cual día editábamos una nueva canción de Las Dianas, que entre alguna que otra versión, de Alex Chilton a Julieta Venegas, sus temas propios, joyas tempranas como “Leggings rotos”, “Te quiero Lejos” u “Olvidamé”, la estaban liando bien liada. Calando almas, callando unas bocas y dejando otras completamente abiertas y babeantes.
Te dejamos seguir haciendo, lo importante es que tú estés bien. El directo de Las Dianas se consolida. Cada concierto es mejor que el anterior. No solo porque ganan experiencia: al otro lado se hace evidente que lo de Las Dianas es otra cosa, es nivelón. Al otro lado del escenario y al otro lado del charco, donde siguen conquistando corazones, como el de Instituto Mexicano del Sonido, siempre un par de pasos por delante del futuro, que colabora con Las Dianas en “Y a ti qué te importa”, incluida en la banda sonora de la serie mexicana de Netflix CTRL+Z, estrenada el pasado mes de agosto.
Hoy regresamos de nuevo, en modo fan, para que quede bien claro que en Casa Maracas lo más importante es Lo que te pide el cuerpo: nuestro modus vivendi, una respuesta infalible y el título del primer LP de Las Dianas.
Lo que te pide el cuerpo, da un nuevo sentido al verbo querer, un nuevo sentido al verbo escuchar y un nuevo sentido al adverbio pronto. Y si pones un poquito de atención, te demuestra que la expresión “cosa de chicas” no tiene nada que ver con eso que tienes en la cabeza; y que los armarios, mejor abiertos; y los tontos, mejor cuanto más lejos.
