Madrid, 11 de septiembre de 2025. Lula Club
Clap Your Hands Say Yeah visitaban Madrid de la mano del Ciclo Jaguar, en una de las dos paradas en nuestro país de la gira mundial que han emprendido por la celebración del vigésimo aniversario de su histórico álbum debut homónimo.
La apertura de la noche en el céntrico Lula Club fue a cargo de Glassio. Con este nombre firma su proyecto el cantante, compositor y productor de origen irlandés-iraní Sam R. A medio camino entre el indie dance y el dream pop, su música engloba toques de electrónica francesa y británica con tropos de cantautor, explorando temas como el dolor y la pérdida. Para esta ocasión se acompañó únicamente de su guitarra y unas bases pre-grabadas, su carisma y su talento innato completaron la formación. Un breve e interesante concierto en el que el neoyorquino aprovechó para presentar alguno de los temas que formarán parte de su próximo tercer LP.
Pakito Serrano
Redactor
Después de una larga espera tras la actuación de su telonero los Clap Your Hands por fin descendieron las escaleras que comunican el escenario con el backstage del Lula Club acompañados de una sonora bienvenida. La sala completa y al borde del “sold out” rugía de expectación, desbordaba ante la oportunidad de volver a escuchar en directo y en el orden en el que fue concebido un disco que marcó un hito y a una generación.
El hito. La importancia de este “Clap Your Hands Say Yeah” (Autoeditado, 2005) se puede medir en el plano discográfico, pues fue parte esencial en el crecimiento del fenómeno de la música independiente. Sin sello discográfico, ni agencia de representación alcanzaron un éxito sin precedentes gracias al boca a boca en aquella internet previa a las redes sociales del 2.005, y a críticas excepcionales como la de Pitchfork, quien los calificó como la «New best band» del momento convirtiendo el disco en un verdadero fenómeno.
La generación. Porque la importancia de este disco también se puede medir en el plano emocional de aquellos que acudimos al concierto y de aquellos que continúan dándole al play tras más de veinte años. Y es que desde el momento en el se oyeron los primeros acordes de “Clap Your Hands!”, tema que abre el disco, hasta el último acorde de “Upon this Tidal Wave of Young Blood” la magia de la música se puso a funcionar a plena potencia haciéndonos viajar entre recuerdos, muchos y buenos, a los que puso banda sonora este Clap Your Hands.
Encabezados por el enigmático Alec Ounsworth y en formato cuarteto, el directo de Clap Your Hands consiguió plasmar de forma exitosa esa rara alquimia de estilos e influencias que encontramos en el disco homenajeado. Aunque la ecualización del sonido no estuviese a máxima altura durante todo el concierto, sí que se apreciaron de forma clara todo el conjunto de zumbidos de sintetizadores, guitarras agudas, baterías bulliciosas y la aullante voz de Ounsworth. De pocas florituras y movimientos sobre el escenario, los componentes de Clap Your Hands se compenetran y se entienden con solo mirarse, interpretando con soltura y entrega cada una de sus canciones, haciendo de este concierto la experiencia más cercana posible a haber vivido uno de los directos de aquel lejano año 2.005.
Tras el apabullante viaje de nostalgia que supuso la escucha integra de su primer disco la banda aprovechó la parte final de su concierto para interpretar algunos temas sueltos de su discográfica como “Fireproof”, “Ketamine and Ecstasy” o Satan Said Dance”.
